¿Estás pensando en invertir por primera vez? Esto es lo que debes saber.
Hoy en día todo el mundo habla de invertir. Criptomonedas, oro, fondos indexados, inmobiliaria… Las opciones son miles, pero antes de realizar cualquier inversión, es indispensable que tengas un muy buen control de tus finanzas, para saber, cuánto, dónde y el porqué de tu inversión.
Cualquier inversión implica un riesgo y por tanto, antes de invertir es importante tener una situación financiera saneada.
Aquí te dejo las claves para invertir de forma segura y no poner en riesgo dinero que puedas necesitar en el futuro:
- El presupuesto
- Capacidad de ahorro
- El Fondo de Emergencia
1. El presupuesto
No nos imaginaríamos encontrar un tesoro escondido sin tener un mapa primero, así como tampoco podríamos llegar a cierto destino si no sabemos previamente por dónde tenemos que ir. Miento. Sí que podríamos, pero con el doble de tiempo o por azar. Lo que yo llamo dar palos de ciego.
Una de las causas por las que quizás no llegues a fin de mes, no puedas ahorrar, ni mucho menos invertir, es precisamente la falta de información en saber dónde está la fuga de dinero.
Un presupuesto es la clave para conocer tu salud financiera y saber si esta cojea por algún lado. Pero además, si estás pensando en invertir, será crucial para saber si tu economía está preparada para ello. Tu presupuesto será el mapa que te llevará a conseguir tus objetivos financieros.
Te puede parecer una tarea complicada, pero nada más lejos de la realidad, al final solo se trata de sumar, restar y multiplicar y si encima te viene dado, solo de llevar un orden y anotar mes a mes tus movimientos. Por ello te dejo aquí mi plantilla Excel de presupuesto, para que esta excusa no te sirva y ¡empieces a utilizarlo!. Importante, leas primero en la plantilla, la pestaña de «Cómo funciona».
Utilizar un buen presupuesto te dará numerosos beneficios.
Te permitirá entender tus hábitos de consumo. Te ayudará a categorizar cada gasto que hagas, ser consciente de cuánto te puedes gastar en cada categoría y ver si efectivamente está balanceado o tienes fugas. Una vez identificadas las fugas, podrás ponerles solución. Con la visibilidad que te aporta, podrás tomar mejores decisiones y fijar tus objetivos de vida. Especialmente aquellos que tienen que ver con tus finanzas personales, tanto para necesidades presentes como a futuro.
Te permitirá detectar lo que algunos llaman gastos hormiga, son gastos pequeños, a los que no damos importancia, pero que al final del año suman una cantidad importante. Quizás ni nos demos cuenta que estamos gastando mucho dinero en comida para llevar, cafés, suscripciones, ropa, etc. Y está bien disfrutar de estas cosas, pero siempre y cuando lo hagamos conscientemente.
Un presupuesto no pretende impedir que disfrutemos de nuestro dinero, al contrario, lo que pretende es que ese dinero se optimice y se utilice de la mejor forma posible para poder cumplir nuestros sueños.
Tu presupuesto será la guía que te permitirá no solo conocer la realidad actual de tus finanzas, sino que puedas establecer objetivos financieros a futuro y facilitar su consecución. Por ejemplo, si tu meta es ahorrar cierta cantidad, puedes ver a través del presupuesto si efectivamente te está sobrando la cantidad que necesitas para poco a poco llegar a esa meta de ahorro o de inversión.
Idealmente el presupuesto deberíamos dividirlo de la siguiente manera:
2. Capacidad de ahorro
Conocer nuestra capacidad de ahorro es fundamental. Como indicaba en el gráfico de antes lo ideal es que pudiéramos destinar un 20% de nuestros ingresos al ahorro, pero puede ser un objetivo ambicioso para algunos. No te preocupes, lo importante es empezar por algo. Pero sí, es importante, que al menos consigas ahorrar un 10% de tus ingresos y si no te da la vida, al menos marcarlo como objetivo a futuro.
Y cómo calculamos nuestra capacidad de ahorro:
A nuestros ingresos mensuales, restaremos nuestros gastos fijos mensuales y a esto nuestros gastos personales, lo que nos queda es nuestra capacidad de ahorro.
Ojo, si no consigues ahorrar nada a final de mes, deberías revisar tus gastos, para detectar esos gastos hormiga o gastos a reducir como las comisiones, los seguros y los suministros. Seguro que dedicándole un tiempo a comparar precios de distintos proveedores y renegociando condiciones podrás mejorar las tarifas de tus contratos.
3. El Fondo de Emergencia
Un “Colchón de Seguridad” o “Fondo de Emergencia” es un dinero que guardaremos en nuestra cuenta de ahorro y que no gastaremos ni invertiremos bajo ningún concepto. Este dinero servirá en caso de imprevistos así como en una reducción drástica de nuestros ingresos.
Disponer de un “Fondo de Emergencia” para imprevistos evitará que tengamos que recurrir a opciones más caras como pedir un préstamo o tener que vender inversiones.
¿Cuánto se debe tener guardado?
Y para que se te quede grabado a fuego, te aconsejo que te lo imprimas y te lo pongas en la nevera o en algún sitio que veas de manera recurrente. Algo que funciona muy bien es la repetición constante, como un mantra.
Importante, si no tienes tu “Fondo de emergencia” cubierto, tu ahorro se destinará a cubrirlo.
Y esta es la forma en la que deberíamos organizarnos:
🔸 En nuestra cuenta corriente: Tener el dinero que entre a través de la nómina.
🔸 Establecer un pre-ahorro mensual. ¿Qué significa? Automatizar el ahorro a principios de mes para así, adaptar nuestro estilo de vida habiendo priorizado el ahorro. Solo así conseguiremos ahorrar cada mes. Si lo hacemos al final, corremos el riesgo de haber gastado todo el dinero del mes y que no nos sobre nada para el ahorro.
🔸 Tener una cuenta de Ahorro: En donde guardaremos nuestros “Colchón de Seguridad o Fondo de Emergencia”.
Y ahora sí, una vez tienes tu presupuesto, tu colchón de seguridad cubierto y una capacidad de ahorro de mínimo 50 € al mes, ya podrías plantearte comenzar a invertir.
Como te decía, criptomonedas, oro, fondos indexados, inmobiliaria… Las opciones son miles, por eso antes de invertir, fórmate y conoce bien dónde te metes y si no tienes tiempo de formarte bien, contacta con un asesor financiero. Es imprescindible que entiendas el producto o tipo de inversión que elijas.
Si después de leer el post, tienes dudas, preguntas o sugerencias, déjame un mensaje en los comentarios ¡estaré encantada de ayudarte!
Si quieres saber más sobre mi servicio de asesoramiento en inversiones, pincha aquí.