¿Ahorrar o Invertir? ¿Qué te interesa más para aumentar la rentabilidad de tu dinero?
Pues déjame decirte que no tienes que elegir uno u otro, porque ahorrar e invertir son compatibles y en este artículo te voy a contar porqué y cómo hacerlo de la manera más eficiente.
¿Qué significa ahorrar y qué características tiene?
En esto no me voy a entretener demasiado porque la mayoría sabéis perfectamente de qué se trata. Simplemente es guardar tu dinero en el lugar que consideres más seguro, con la finalidad de contar con una cantidad de dinero para posibles emergencias o compras que puedan surgir en un futuro.
Pero lo que mucha gente no sabe es que el ahorro tiene 3 características relevantes que hay que conocer, para entender la diferencia entre el ahorro y la inversión.
- Seguridad: El dinero está seguro y no corre riesgos.
- Accesibilidad: Puedes acceder a tu dinero siempre que quieras de manera fácil cuando lo necesites.
- Bajo rendimiento: Aquí viene la parte débil del concepto, el dinero que ahorras no crece mucho porque los intereses son muy bajos o NULOS y la inflación te va “comiendo” poco a poco el dinero.
¿Dónde es el mejor sitio para guardar el dinero?
Aparte de los conocidos como debajo del colchón, en una caja fuerte o en tu cuenta bancaria normal, existen 3 formas de guardar o ahorrar tus finanzas obteniendo un pequeño interés pero con seguridad.
Estas son, las cuentas de ahorro, las cuentas remuneradas y los depósitos a plazo fijo:
- La cuenta de ahorro
Una cuenta de ahorro es uno de los productos más conocidos y sencillos de usar que ofrece cualquier entidad financiera. Te permite guardar tu dinero en el banco a cambio del pago de un pequeño porcentaje de intereses (ridículo, no te voy a engañar) y te ofrece total libertad a la hora de manejar tus fondos, sin penalizaciones de retiro ni nada por el estilo. Eso sí, algunas entidades pueden limitarte en los retiros mensuales, siempre hay que leer la letra pequeña de lo que firmas.
- Las cuentas remuneradas
Las cuentas remuneradas son un producto de ahorro tal y como acabo de describir, sus características son muy similares, eso sí, te ofrece una rentabilidad un poco mayor que las cuentas de ahorro más tradicionales y tienen algunas diferencias más. Te ofrecen intereses más elevados, pero en algunos casos, solamente por tiempo limitado, buscando la captación de nuevos clientes o cualquier otro objetivo de la entidad (mira la letra pequeña). También suelen ofrecer tarjetas o que te requieran la nómina, incluso algunos te piden una pequeña permanencia a cambio de los intereses más altos (pero sin llegar a los depósitos de plazo fijo). Sería como una mezcla híbrida entre una cuenta normal y de ahorro.
- Los depósitos a plazo fijo
Obviamente tienen unos intereses más altos que las cuentas de ahorro y cuentas remuneradas, pero debes dejar tu dinero en el banco por un período específico que pueden ser de meses o de años. Y cómo se te ocurra retirar tu dinero antes de que termine el plazo, seguramente pagarás una penalización o perderás parte de los intereses.
- Conclusión
Las 3 opciones son muy seguras, con intereses no muy altos, pero puede ser de utilidad si quieres tener una parte de tu dinero guardado para emergencias o cualquier objetivo que sabes que necesitarás el dinero al momento, es más… recomiendo sacarle un pequeño interés a tus ahorros antes que no sacarle nada.
Eso sí, tanto en las cuentas de ahorro como las cuentas remuneradas, la accesibilidad es alta, pero en los depósitos de plazo fijo no tienen accesibilidad inmediata y debes tener en cuenta esta cuestión.
¿Qué significa invertir y qué características tiene?
Ahora viene la parte que no está tan vista o escuchada y dónde las personas tienen más miedo de utilizar por desconocimiento o porqué sus creencias sobre el dinero no les hace ver otras opciones, la inversión.
Invertir es como plantar una semilla, y esa semilla mientras la vas regando durante el paso del tiempo, crecerá poco a poco y te acabará dando los frutos. Depende cómo cuides tus semillas, así saldrá tu cosecha. Con las finanzas es lo mismo.
Hemos dicho que el objetivo de ahorrar es proteger y guardar tu capital para imprevistos, pues en el concepto de invertir, hablamos de poner tu dinero en algún lugar con el objetivo de que crezca con el tiempo (como una semilla).
La primera gran diferencia entre ahorrar e invertir es que en la inversión, implica asumir ciertos riesgos, pero también ofrece mayores recompensas.
El objetivo principal de la inversión es vencer a la inflación, por lo que siempre habrá que buscar inversiones que puedan tener un retorno superior a la inflación año tras año.
Podemos invertir en infinidad de temáticas. De hecho, cada tipo de inversión va a ser ideal según para qué horizonte temporal o qué objetivo. Es por eso que siempre les preguntamos a mis alumnos acerca de cuáles son sus metas financieras para adaptar siempre la inversión a aquello que desean.
¿Invertir en acciones, fondos de inversión, ETFs, seguros de ahorro, oro y metales preciosos, crowdfunding, criptomonedas…?
Como decía, hay un sinfín de posibilidades. De hecho te he hablado de muchas de ellas en otros artículos, así que si quieres profundizar en todo esto, no dudes en pasarte a ver otros artículos que he publicado cuando acabes de ver este.
Gracias a la inversión, puedes alcanzar tus metas en el menor tiempo posible, gracias al efecto “bola de nieve” del interés compuesto, de lo que ya te he hablado en profundidad aquí.
Las 3 características relevantes de la inversión son:
- El riesgo: El dinero que inviertes puede crecer, pero también puedes perderlo (sobre todo si lo haces sin tener conocimiento).
- Potencial de crecimiento: A largo plazo las inversiones te generan rendimientos más altos que el ahorro.
- Menor accesibilidad: Puede que no puedas acceder a tu dinero de manera tan fácil como el ahorro, pero es la única manera de maximizar los beneficios a largo plazo.
¿Ahorro o Invierto?
¡Y ahora viene la pregunta del millón!
Vale Elizabeth, me han quedado claras las diferencias, pero… ¿cuándo debo ahorrar y cuándo invertir?
Pues depende de tu situación actual, de tu perfil de riesgo y de tus objetivos, está claro, y si llevas tiempo leyéndome, ya habrás reflexionado sobre ello porque te he hablado mucho sobre estos temas.
Si por ejemplo:
Eres una persona que tienes objetivos a corto plazo, que necesitas el dinero en menos de 3 años para una emergencia o unas vacaciones… mejor ahorra y ten el dinero más seguro.
En cambio, si eres una persona que no necesitas el dinero pronto y puedes dejarlo crecer durante 5-10 años, pues no te diré que lo metas en una cuenta de ahorro sinó más bien te diría que inviertas o te enfoques en ahorrar para invertir posteriormente ese dinero.
Como ves, va a depender mucho de tu situación. Yo siempre recomiendo un equilibrio entre tener unos ahorros para el colchón de emergencia o algún objetivo a corto plazo y un dinero para invertir a futuro. Los porcentajes dependen mucho de tu perfil de riesgo.
Yo misma ahorro e invierto a la vez.
¿Cómo?
Invierto para mis objetivos a medio y largo plazo, como puede ser invertir el dinero para la jubilación. Así como también tengo inversiones en oro y en inmobiliario que me generan ingresos extra cada mes y eso me permite diversificar las fuentes de ingresos, a la vez que financiar mi estilo de vida.
A la vez, también ahorro para mis viajes que voy a realizar en un año, o incluso voy ahorrando periódicamente una cierta cantidad de dinero cada mes para cuando me vienen los gastos grandes como el IBI y los seguros.
Porque imagínate…
Tienes 1000€ y no sabes qué hacer con ellos. Pues que sepas que si los ahorras en una cuenta de ahorros con un interés del 1% anual, a final de año tendrás 1010€. Tu dinero está seguro pero ya has visto que su crecimiento es ridículo.
Si lo inviertes por ejemplo en un fondo de inversión con un rendimiento del 6%, pues a final de año tendrás aproximadamente 1060€. A la larga, aunque tenga más riesgo, tiene más potencial de crecimiento.
Con los 1000€ no se nota mucho la diferencia, pero a la larga, es cuestión de hacer cuentas.
¡Hasta la próxima!